Oh Toño!

Queridos amigos, tengo un trancazo del copín. El copín es como una copa pero pequeña y el trancazo es la mierda que he cogido por la mortal mezcla del buen tiempo que nos acompaña y el aire acondicionao que me cae en todo el melón. El otoño ha venido y nadie sabe como ha sido. Comienzo en un nuevo curro realizando una web, otra, y ya van tropecientasmil. Me falta tiempo por todos lados pero siempre puedo pasar de dormir. Me he apuntado a la piscina, a la academia y a la agrupación política de mi pueblo donde aspiro a ser el máximo representante. Viene por ahí un puente y una semanita de vacaciones donde espero encontrarme a mí mismo, darme un sopapo y relajarme un poco, que falta me hace. Ni para ver la tele tengo tiempo, menos mal que no ponen nada. Si mañana no estoy en la cama con 40 (de fiebre, chiste fácil), escribiré otra sarta de jilipolleces como la de hoy, para dar las gracias por todas esas personas, que como tú, piensan que esta página tiene algo de interés. Me confesaba Manolo, que ahora se mete (en la página) casi todos los días. Me hizo mucha ilusión. Para todas las personas que encuentran en mi presencia la versión carnal de mi página, que me regalan su tiempo y que representan el verdadero sentido de la vida que son las relaciones personales, dedico estas melancólicas palabras. Porque el otoño es una mala época para ser feliz, pero entre todos lo conseguiremos, un abrazo para todos mi fans. (Uf, vaya rollazo)